​                                                                                                                                                                             Por:  Alejandro Hernandez​

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Todo inicia hace 3 años, cuando fue llevado al hospital del Meissen ubicado en la localidad de ciudad Bolívar,  donde no lo atienden después de varias horas de estar esperando en la sala de urgencias, “Si uno no llega con las tripas afuera no lo atienden” Afirma Miguel; sin resultado alguno decide irse con su hija a la droguería de Don Luis, en el barrio San Benito, donde lo atienden y le formulan  una serie de droga que lo mantiene bien por algunos días, pero sin respuestas concretos que le dijeran que estaba pasando con su salud, después de algunos días recae  y su familia decide llevarlo al hospital de Tunjuelito donde lo hospitalizan por una semana y le diagnostican un alto nivel de azúcar en la sangre.
 

Esta noticia genera un cambio en su vida personal y familiar, empiezan los cuidados por parte de su esposa e hija; el tratamiento disciplinado que este exige, la insulina,  la cantidad de medicamentos a horas exactas, la exigente y  cuidadosa  dieta, sin obtener  resultados positivos  en su salud, baja considerablemente de peso en pocas semanas.
 

Sin embargo su hermano mayor quien también padeció de altos niveles de azúcar, le sugirió tomar agua de gautila, recomendación que acoge inmediatamente, en pocas semanas recupera  masa corporal y aumenta 4 kilos, su nivel de azúcar disminuye de 400 a 110, nivel recomendado por los médicos; Inicialmente lo tomaba 2 veces por semana, con jugo de naranja, después de 15 días lo reduce a  una vez por semana.  La forma de preparación es muy sencilla, se pone a hervir  un litro de agua con un pedazo de gautilla, se toma 2 0 3 veces durante el día.
 

Saquemos  cuentas, una guatilla está en el mercado en $400 aproximadamente,  se divide  en 8 pedazos y alcanza para un mes de medicina natural. Es supremamente económico y efectivo.
 

Desde hace muchos años la guatila ha convivido con nosotros alimentando a nuestra población campesina principalmente por su bajo costo, de ahí el nombre de papa de pobre  por ser poco conocida y apetecida en las mesas más refinadas, Este producto tiene una gran cantidad de propiedades alimenticias para el ser humano de ahí el  excelente estado de salud de nuestros padres y abuelos.